A veces nos enfocamos tanto en las metas más grandes que nos olvidamos de disfrutar de los pequeños detalles que nos regala la vida y que se nos manifiestan como alegrías día a día.
Cualquier momento es el ideal para obsequiar un regalo para alentar a esa persona especial y hazle recordar que nunca es tarde para comenzar a ver las cosas con otros ojos y descubrir esa belleza escondida.